SALVADOR DALÍ
Salvador Dalí Domènech fue un artista español considerado uno de los máximos exponentes del movimiento artístico del Surrealismo.
Su infancia
Primer autorretrato (1921)
Nació en Figueres, municipio español de la provincia de Gerona, el 11 de mayo de 1904. Su familia pertenecía a la burguesía: su padre, Salvador Dalí i Cusí, era abogado de clase media y notario, y su madre, Felipa Domènech i Farrés, alentaba los intereses artísticos de su segundo hijo. Su primer hijo, también llamado Salvador, murió con tan solo nueve meses, y el hecho de que sus padres decidieran ponerle el mismo nombre le marcó posteriormente, llegando a tener por ello una crisis de personalidad. También tuvo una hermana, Ana María, tres años menor que él. En el año 1949, escribiría un libro sobre su hermano, titulado Dalí visto por su hermana.
En esta pintura, Figura asomada a una ventana (1925), Dalí representa a su hermana, como hace en otras obras
En un viaje a Cadaqués, Dalí descubrió la pintura contemporánea por medio de Ramón Pitchot, un pintor que solía viajar a París para empaparse de las corrientes pictóricas del momento. Lo que más puede sorprender es su enorme precocidad: con solo 12 años conoció el impresionismo francés y se hizo impresionista, a los 14 ya trató con el arte de Picasso y adoptó el cubismo y a los 15 se convirtió en editor de la revista Studium, donde dibujó brillantes pastiches para la sección titulada "Los grandes maestros de la Pintura".
Uno de los hechos que más afectaron al artista catalán fue la muerte de su madre en 1921, de la que dijo fue “el golpe más fuerte que he recibido en mi vida. Le adoraba. No podía resignarme a la pérdida del ser en quien contaba para hacer invisibles las inevitables manchas de mi alma…”

Su juventud en Madrid y París
Ya en el 1922, Dalí marchó a Madrid e ingresó en la Residencia de Estudiantes, para comenzar sus estudios en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Fue entonces cuando empezó a atraer la atención por su aspecto de dandi: pelo largo con patillas, gabardina, polainas,… Pero lo que realmente fue más llamativo para sus compañeros de residencia fueron sus cuadros, de tendencia cubista, ya que por aquellos tiempos no había pintores en Madrid que hubieran adoptado esta corriente. Algunos de estos compañeros fueron su íntimo amigo, el poeta Federico García Lorca, el director de cine surrealista Luis Buñuel, etc. En 1923, debido a unas revueltas contra un profesor, las autoridades creyeron que había sido Dalí el provocador de estas y decidieron expulsarlo un año. En 1924, al volver a la academia se ve obligado a repetir curso. Sin embargo, el curso siguiente (1925-1926) no regresa a la Academia de San Fernando. Ese verano, García Lorca, fue a visitarlo y, en ese momento, fue cuando escribió la “Oda a Salvador Dalí”, que sería publicada en 1929; también fue entonces cuando Buñuel le pidió su colaboración en el guión del cortometraje que rodaba, Un perro andaluz, de características totalmente surrealistas, que se estrenaría en 1929.
Cesta de pan (1926)
Alrededor de 1924, el pintor empezó a familiarizarse con el dadaísmo, una corriente que marcaría toda su obra. Sin embargo, a medida que iba influenciándose de uno y otro estilo artístico, desde el academicismo clásico a las vanguardias más rompedoras, los iba acumulando en su propia técnica. En 1926, año en el que pinto su increíblemente realista Cesta de pan, conoció en un viaje a París a uno de sus maestros en la distancia, Pablo Picasso, quien anteriormente había alabado su pintura. En ese mismo año, es expulsado definitivamente de la Academia de San Fernando por declarar incompetente al Tribunal que tiene que examinarlo. Dos años después, Dalí se estableció en París y empezó a exponer sus óleos como profesional, además de unirse al grupo surrealista creado por el poeta André Breton, con el que se pone en contacto a través de Joan Miró.

Entre 1929 y la II Guerra Mundial
En el año 1929, Dalí conoció a su musa y su futura mujer, Gala, que en ese momento estaba casada con el poeta Paul Éluard; su obra influyó en el devenir del surrealismo durante los dos años siguientes, que le aclamó como creador del método paranoico-crítico que, según se decía, ayudaba a acceder al subconsciente, liberando energías artísticas creadoras. Esta es la época en la que pinta Adecuación del deseo, Placeres iluminados y El gran masturbador.
El gran masturbador (1929)

La persistencia de la memoria (1931)
Desintegración de la persistencia de la memoria (1952-54)
En 1931, en el momento de su vida en el que su relación era más convulsa con su padre, dado que este no aprobaba su amor hacia Gala, fue cuando pintó uno de sus cuadros más famosos mundialmente, La persistencia de la memoria, conocido comúnmente como Los relojes blandos. Pero este no es el único cuadro en el que Dalí introduce el concepto del reloj blando, ya que un año antes lo uso en Osificación prematura de una estación ferroviaria, y más tarde lo usaría en La desintegración de la persistencia de la memoria (1952-54) o Reloj blando en el momento de su primera explosión (1954).
En 1934, se casó finalmente con su musa, Gala, y ese mismo año, se marcharon ambos a Nueva York, donde expuso, entre otros, Persistencia, lo que desató un gran revuelo en la ciudad. En diversas apariciones públicas, el comportamiento surrealista de Dalí no fue plato de buen gusto para los neoyorquinos, y en una ocasión tuvo que pedir perdón. Al volver a París, este hecho no fue pasado por alto por sus compañeros del grupo surrealista al que pertenecía, ya que no entendieron porque se había tenido que disculpar. Por esto y por sus ideas políticas, no tan izquierdistas como las de Breton y sus camaradas, Dalí fue expulsado del grupo, tras pasar por un “juicio surrealista”. Ante ello, Dalí respondió diciendo: “Yo soy el surrealismo”
En 1936, se desató la Guerra Civil española, y poco después le comunicaron que su amigo Federico García Lorca había muerto asesinado. Dalí escribió: "Lorca tenía personalidad para dar y vender, la suficiente para ser fusilado, antes que cualquier otro, por cualquier español."
Teléfono-langosta
Edward James era en aquella época su mecenas, y le había ayudado tanto a ir ascendiendo progresivamente como artista que, como muestra de amistad, lo retrató en su pintura Cisnes reflejando elefantes. Ambos fueron los creadores del “teléfono-langosta” y el sofá de los labios de Mae West, que aparece en su obra Retrato de Mae West que puede utilizarse como apartamento surrealista.
Retrato de Mae West que puede utilizarse como apartamento surrealista (1934-35)
Cisnes reflejando elefantes (1937)
El sueño (1937)
En 1938 conoce, gracias al escritor vienés Stefan Zweig, a Sigmund Freud, quien había sido el gran inspirador de la estética surrealista, de la que Dalí no se siente marginado pese a lo que decía Breton, sino que se considera el máximo exponente. En 1939, el poeta francés acuñó el anagrama despectivo «Avida Dollars» para criticar su pasión por el dinero y para acusarle megalomanía mediante la fama y el dinero, hecho que al pintor no le molestaba. Algunos de los surrealistas comenzaron incluso a hablar de Dalí en pretérito perfecto, como si ya hubiera fallecido.
Su período en Nueva York
En 1940, en pleno auge de la Segunda Guerra Mundial, Dalí y Gala se marcharon a Estados Unidos, donde vivieron durante 8 años. Allí, el artista se dedicó, sobre todo a escribir: realizó un guión para una película (Moontide), publicó su autobiografía La vida secreta de Salvador Dalí, escribió para los catálogos de sus exposiciones, redactó una novela,… También diseñó ilustraciones para una edición de El Quijote en inglés, y de los Ensayos de Michel de Montaigne, aportó decorados para la película Recuerda de Alfred Hitchcock, y comenzó a colaborar con Walt Disney en la realización de un cortometraje de dibujos animados, Destino, del que solo se rodaron 20 segundos. Sin embargo, gracias a los bocetos que dejo Dalí, en 2003, fue montado por Roy Disney y Baker Bloodworth. A continuación, podemos ver el resultado final del corto.
Que se dedicara a estas tareas no implica que en este período en Estados Unidos no pintara cuadros. Algunos de los que realizó en esta época son Niño geopolítico mirando el nacimiento del hombre nuevo, Sueño causado por el vuelo de una abeja alrededor de una granada un segundo antes de despertar, Las tentaciones de San Antonio, La separación del átomo, conocido también como Desmaterialización cerca de la nariz de Nerón, que pintó como fruto de la conmoción que causó el uso de la energía atómica al término de la II Guerra Mundial.
Niño geopolítico mirando el nacimiento del hombre nuevo (1943)
Sueño causado por el vuelo de una abeja alrededor de una granada un segundo antes de despertar (1944)
Las tentaciones de San Antonio (1946)
La separación del átomo (1947)

Su etapa final en Cataluña
Ya en 1949, Dalí y su esposa se trasladaron a Cataluña, hecho que no fue de buen agrado para sus antiguos compañeros surrealistas, ya que esos momentos el gobierno de España recaía en el dictador Francisco Franco. Así se entiende que las disparidades entre Dalí y sus coetáneos fueran más de signo político que artístico. Es más, Bretón, en una exposición antológica titulada Homenaje al surrealismo, que reunía obras surgidas en las cuatro décadas del movimiento, recuperó obras de Dalí, así como de Joan Miró. Pero al año siguiente, se opuso a la inclusión de la Madonna Sixtina de Dalí en la Exposición Internacional Surrealista de Nueva York.
Crucifición (1954)
Hacia el final de su carrera, Dalí no se dedicó únicamente a pintar: empezó a utilizar la holografía artística. Durante sus últimos años, Andy Warhol le proclamó como una de las influencias más notables del pop art. Dalí también mostró interés por las ciencias naturales y las matemáticas. Así se observa en muchas de sus obras —sobre todo las creadas en la década de los 50— en las cuales llegó a componer retratos individuales a partir de cuernos de rinoceronte. Según el artista, el cuerno de rinoceronte significaba la geometría divina, puesto que crece en una progresión espiral logarítmica. Uno de sus temas recurrentes fue la religión, que relacionó con los temas de la castidad y la santidad de la Virgen María. Otro de los intereses de Dalí era el ADN, y el hipercubo, que llegó a plasmar en su Crucifixión (Corpus Hypercubus).
La época de la posguerra significó para Dalí una nueva etapa artística, que se caracteriza por el virtuosismo técnico y el recurso a ilusiones ópticas, así como la ciencia o la religión. El hecho del nacimiento de la era nuclear y la utilización de la bomba atómica en Hiroshima hicieron que el catolicismo de Dalí llegara a sus máximas cotas. Él mismo denominó a este período místico-nuclear, ya que pretendía sintetizar la iconografía cristiana con imágenes en descomposición relacionadas con la física nuclear. Algunas de las pinturas que realizó desde 1950 en adelante fueron: Leda atómica, La madona de Port Lligat, El cristo de San Juan de la Cruz, Galatea de las esferas, Crucifixión (anteriormente citado), La última cena, Naturaleza Muerta, Viva, Ascensión, El Concilio ecuménico, El nacimiento de una Divinidad, La batalla de Tetuán, Cinco pinturas abstractas que vistas desde dos yardas se transforman en tres Lenin disfrazados de chino y vistas desde seis yardas parece la cabeza de un tigre real, La estación de Perpignan, El Toreador Alucinógeno, Gala contemplando el Mediterráneo, que vista desde veinte metros se convierte en el retrato de Abraham Lincoln (dispone de dos versiones), La Jirafa de Avignon, La búsqueda de la cuarta dimensión, Aparición del rostro de Aphrodita de Cnide, y una de las datadas en 1983, cuando ya deja de pintar, Cama y dos mesitas de noche atacando ferozmente a un violonchelo. Además, también rediseñó el logotipo del Chupa Chups, en el año 1968.
La última cena (1955)
El nacimento de una divinidad (1960)
La batalla de Tetuán (1961)
La estación de Perpignan (1965)
La jirafa de Avignon (1975)
Cama y dos mesitas de noche atacando ferozmente a un violonchelo (1983)
A partir de 1980, la salud de la pareja empezó a deteriorase; Gala manifestaba síntomas de senilidad, y Salvador con 76 años, comenzó a desarrollar la enfermedad del Parkinson. En 1982, el rey Juan Carlos I concedió a Dalí el título de marqués de Púbol, que el artista agradeció con un dibujo, titulado Cabeza de Europa, que resultó ser su último dibujo, y que le entregó tras la visita real a su lecho de muerte. Fue la muerte de Gala el 10 de junio de 1982 lo que hizo que Dalí perdiera las ganas de seguir adelante, razón por la que supuestamente intentó suicidarse en varias ocasiones en el Castillo de Púbol, donde murió su esposa. Por ello fue trasladado a su Figueres natal donde, el 23 de enero de 1989, oyendo su disco favorito —Tristán e Isolda, de Richard Wagner— murió a causa de una parada cardiorrespiratoria, con 84 años, y fue enterrado en la cripta de su casa-museo, situada en Figueras.
Personalmente, elegí hacer el trabajo sobre Dalí porque es una artista que me parecía interesante sin apenas conocer poco más de 3 o 4 de sus obras más famosas. Ahora que soy consciente del devenir de su vida, entiendo ese posible trastorno psicológico de locura que las gentes que no saben de las circunstancias de su vida pueden pensar que tuvo. Sin embargo, él se defendía de esta acusación diciendo: “La única diferencia entre un loco y yo, es que yo no estoy loco”. De las pocas obras que conocía de este pintor me llamaba mucho la atención aquella de los relojes blandos, de la cual desconocía su origen y significado. Eso es lo que ocurre con este pintor, que la gente puede no entender su arte; pero incluso para eso tenía salida: "...el que yo no sepa cual es el significado de mi arte, no significa que no lo tenga...”.
Y para finalizar, un video musical en el que Mecano canta “Eungenio Salvador Dalí”, una canción en homenaje al pintor catalán, posiblemente, más internacional del siglo XX, y que le retrata perfectamente.


Bibliografía
http://www.youtube.com/watch?v=1GFkN4deuZU
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